• Instituto Sonorense de Cultura

  • 01 (662) 212 6570 y 01 (662) 212 6572
  • direccion@isc.gob.mx

Poesía y música con Lee y Stuckley


Por Raúl Amador

Siempre hay viajes que nos sorprenden y el que vivimos en la tercera noche de gala del Festival Alfonso Ortiz Tirado, Álamos 2022 ha sido una de ellas, un programa muy diferente a los dos anteriores, con la poesía como protagonista.

La primera parte, con dos ciclos de canciones: la obra del compositor Joaquín Turina llamado Poema en forma de canciones, Op. 19., conformado por cuatro números: Dedicatoria, Nunca Olvida, Cantares, Los dos miedos, las locas por amor, interpretado por la soprano Coreana Yunah Lee, -con buena dicción y una voz llena de lirismo-, nos brindó una excelente interpretación.

La Premier en México, inspirado en Poemas de Gustavo Adolfo Béquer y compuesto por el joven compositor y pianista mexicano Alain Del Real, conformó el segundo ciclo de canciones; la interpretación estuvo a cargo del barítono Andrew Stuckey, quien fue el cantante que estrenó esta obra, y por lo vivido anoche, parece que el compositor se inspiró en la voz de Stuckey para su creación, ya que el color de la voz del cantante y su interpretación quedaron a la perfección en la música (es sólo una suposición), si no es así, la voz de Stuckey viene perfecta a ella; sin duda es un ciclo que debe ser interpretado por más cantantes y llegar a más público.

La segunda parte del recital estuvo divido en dos duetos de ópera; y la presentación de las cuatro Mazurkas, del compositor mexicano Manuel M. Ponce, a cargo del pianista John Milbauer, quien nos regaló una espléndida interpretación, muy precisa en su lectura, lo que nos demuestra que no sólo es un excelente pianista acompañante.

Lee y Stuckey interpretaron dos dúos para soprano y barítono, ambos del compositor Italiano Giuseppe Verdi, el primero de ellos de la ópera La Traviata “Madamigella Valery… Morró! La mia memoria”, y de la ópera Il Trovatore “Udiste? … Vivrá, contende il giubilo”.

Lee nos demostró en La Traviata una dulzura vocal acompañada de una excelente línea de canto, donde supo mantener esa altura vocal, muy precisa y sin exagerar, ni caer en manierismos que se pudieron dar en la parte dramática de la música.

Por su parte, Stuckey supo dar el carácter de Germont, un padre muy fijo en su propósito, demostrando en su canto su temple en el escenario.

Ya en Trovatore, una vez más demostraron esa conexión que tienen ambos cantantes, brindándonos una clara creación de los personajes Leonora y Conte di Luna; un dúo dramático donde Leonora decide entregarse al Conde, pero antes de ello, ingiere un veneno para mantenerse firme al amor dado a Manrico/Il Trovator.

Y así finalizamos esta tercera gala, no sin antes del encore que solicitó el público asistente con sus aplausos; como resultado escuchamos el dúo de la opereta La Viuda Alegre de Franz Lehar.